La Comparsa de Marinos Corsarios está representada en 2020 por las siguientes cronistas:
- NURIA FERRÁNDIZ DÍAZ
- MARIAN ORTUÑO NAVARRO
LOCAL SOCIAL MARINOS CORSARIOS: DE POSADA A CASA-MUSEO
24/07/2022 – DESCUBRIENDO ACERVO FESTERO Cronistas de la Comparsa
Como bien es sabido, la historia de la comparsa de Marinos Corsarios está constituida por diferentes etapas que se unen unas con otras, de la misma forma que los eslabones se ensamblan para formar la “cadena de leva” que unida al ancla, le aportan estabilidad al barco cuando se amarra al fondo del mar, evitando así que zozobre o se vaya a la deriva. Pues bien, esos eslabones en la historia de nuestra comparsa son aquellas personas que gracias al esfuerzo, generosidad y cariño que tenían por los Marinos Corsarios, evitaron que el barco se hundiese y continuase rumbo a un mejor destino hasta nuestra época
Hoy queremos destacar la labor de un grupo de socios que hicieron posible que pudiésemos conocer nuestras raíces y nos permitieron conocer el pasado de nuestra historia para entender el presente y seguir construyendo nuestro futuro. Al frente de este grupo nos encontramos a Pedro Amorós Milán, al cual queremos brindar en estas líneas un pequeño homenaje por todos los años que dedicó con su trabajo y entusiasmo a la comparsa.
Con tan solo 15 años, pasadas las fiestas de 1963, se hizo socio de la comparsa. Era el principio una nueva época de resurgimiento de la misma, que había empezado en 1961. Participante activo de cualquier idea para engrandecer a los Marinos Corsarios, colaboró en la preparación de las verbenas que se hacían en la C/ Empedrada, realizando la instalación eléctrica, luces y decorado junto a su amigo Antonio Marruenda Ferrándiz, ayudo en la realización de la primera carroza, fue creador y fundador junto con un grupo de amigos del grupo ofrenda, vicepresidente, cronista, delegado de la junta central de fiestas, presentador y organizador de la presentación de madrinas y cena del día 4, Capitán de la comparsa, socio ejemplar, fundador del grupo ofrenda, torero de la corrida de toros del día 9, con el apodo de “el maravilloso” y un sinfín de cosas más. Su encomiable labor en cada una de las actividades en las que participó siempre tuvo como objetivo engrandecer a los Marinos Corsarios.
No obstante, de entre sus hazañas, hoy queremos destacar y dar a conocer aquel hecho que supuso el inicio de la creación de nuestro patrimonio histórico (1974-1980), el embrión que dio lugar al tesoro que hoy día disponemos como es nuestra CASA-MUSEO.
En el año 1976, la comparsa tuvo la necesidad de comprar un local social, ya que la casa de la C/Empedrada había sido vendida. Tras la propuesta de Joaquín Milán García y posterior estudio de la misma, fue aprobado en junta extraordinaria comprar la posada “Tía Sevilla” en la C/ La Tercia, nº1. Por aquella época, Pedro Amorós Milán era vicepresidente y cronista. Su insaciable curiosidad por conocer nuestra historia así como, su rigor y minuciosidad por hacer bien su trabajo, hizo que mes a mes y año tras año, se hiciera con una gran cantidad de relatos, fotografías y objetos de la historia de los Marinos Corsarios que iba plasmando en sus crónicas. Su inquietud y generosidad por dar a conocer ese tesoro tan valioso hizo que el 20 de noviembre de 1979 propusiera a la directiva hacer una exposición con el patrimonio histórico de nuestra comparsa, en la nueva sede social.
Era una propuesta valiente porque no solo había que darle forma a todos los objetos de la exposición sino que también había que arreglar la zona de la posada donde se le pudiera dar cobijo. Ese mismo año se habían unido diferentes dependencias para hacer el salón, se había arreglado el suelo, hecho una barra y unos aseos, pero aun así, había que trabajar mucho en ella. Se decidió hacer la exposición en la zona de las cuadras, por lo que hubo que derribar los pesebres, pintar las paredes, forrar con telas de terciopelo aquellas que estaban en peor estado incluyendo los puntales, hacer la instalación eléctrica para poner los focos que iluminasen todos los detalles y adecentar el resto.
Para la exposición se hicieron grandes murales donde Pedro Amorós Milán se encargaba de acoplar las fotografías antiguas y las nuevas que habían realizado de los objetos que todavía se conservaban, retocando su tamaño para conseguir el máximo equilibrio. Junto a cada una de ellas un rótulo mecanografiado por Juan Pedro Ortín Martínez documentaba los datos más importantes.
La escuadra de Caribes cedió dos maniquís y el traje de Colombino que había recibido el primer premio de Escuadra Especial, se expusieron también los trajes oficiales que había tenido la comparsa durante los 100 años anteriores y un traje de niño correspondiente a la época de los marineros antiguos que pertenecía a Juan Marruenda Ferrándiz. Se expusieron las banderas oficiales de la comparsa y todos aquellos objetos que se habían conseguido y que estaban perfectamente documentados. Como detalle, destacar una red pesquera original que se colgó del techo para darle más ambiente marinero.
Para la fachada, que estaba muy mal conservada, se hizo un cartel de tres metros de largo donde se podía ver el barco con una orla en forma de castillo y donde ponía Marinos Corsarios.
Y así, con trabajo y mucho esfuerzo, el 2 de agosto de 1980 se realizó la “I Exposición del Patrimonio Histórico de los Marinos Corsarios”, 100 años de historia en un ambiente marinero de la época. Esta exposición se consiguió llevar a cabo gracias al esfuerzo colectivo de un grupo de jóvenes entre los que destacamos a Manuel Díaz Pérez, José Ortín Martínez, Martín Pascual Estevan, Antonio Marruenda Ferrándiz, Pedro Vicent Ugeda, Antonio Espinosa Beneito, Nicolás Cerdán Catalán, Antonio Jordán Navarro, José Berenguer Castaño, Juan Pedro Ortín Martínez y Francisco Sánchez Barceló entre otros muchos a los que reconocemos desde aquí su entrega y entusiasmo.
Fue la primera exposición de ese tipo que se hizo en Villena, y como tal fue reconocido en diferentes revistas consiguiendo incluso un artículo alusivo de Alfredo Rojas Navarro.
El formato de la exposición de los Marinos Corsarios fue un éxito, tanto que se plasmó al año siguiente en una exposición que se celebró en la casa del festero. Romualdo Moreno Torres presidente de la JCF, le propuso a Pedro Amorós Milán, que por entonces era delegado de la JCF, hacer una exposición igual de triunfante que la de su comparsa pero en esta ocasión, para todo el pueblo de Villena. Él gustosamente aceptó y formó una comisión con un representante de cada comparsa para recabar información. La tarea encomendada llevo otras faenas derivadas de su cargo como limpiar la cambra, arreglar suelos, montar electricidad, luces, paredes, incluso restaurar el fresco que había en el techo que debido a las goteras y humedades se había estropeado. Dichas actividades de restauración las llevo a cabo Antonio Marruenda Ferrándiz que gracias a su profesionalidad y buen gusto artístico consiguió un resultado asombroso. Para tal evento, comparsas y escuadras aportaron parte de su historia pasada, el maestro Manuel Carrascosa García y Juan Soler Esteban (presidente del patronato de la banda musical de Villena) donaron partituras, trajes, objetos e instrumentos y, muchas otras personas motivadas por compartir su historia, donaron objetos de gran valor.
Finalmente, después de muchos meses de trabajo, el 24 de mayo de 1981 se inauguró la “I Exposición Festera de Villena”. El éxito fue tal que se decidió que se convirtiera en el Museo de la Casa del Festero para disfrute y satisfacción de toda la ciudadanía. A partir de entonces la Mahoma de Biar formó parte del Museo y pudo ser disfrutada por todos los villeneros y villeneras. Finalmente, ese grupo incansable de voluntarios capitaneados por Pedro Amorós Milán fueron nombrados custodios del Museo.
Con el paso del tiempo la Posada “Tía Sevilla” se fue convirtiendo en el hogar de los Marinos Corsarios y hoy día podemos sentirnos orgullosos de haberla transformado en nuestra “Casa-Museo”. Gracias a todas las personas que trabajaron codo a codo en aquella época y a todas las que siguieron su estela podemos sentirnos orgullosos del gran tesoro que poseemos.
Aunque muchas fueron las personas que hicieron posible aquel momento histórico, desde nuestro punto de vista, Pedro Amorós Milán fue el artífice, protagonista y organizador de este hecho tan importante, el cual si no se hubiera realizado, escrito y documentado, nunca hubiera existido. Tuvo la generosidad de mostrar su tesoro y compartirlo para que no se perdieran nuestras raíces, para que conociésemos a nuestros ancestros, aquellos eslabones que se unieron para no dejar zozobrar nuestro barco.
Y aunque él no se siente protagonista de esta historia, ya que siempre cuenta que fue uno más de aquel grupo de jóvenes de la época y que sin todos ellos no hubiera sido posible realizarlo, es justo y un deber reconocerlo como el organizador y artífice de tan importante hazaña .Por ello y por muchas más cosas que no aparece en estas limitadas líneas, queremos darte las gracias. Por todo lo que hiciste, por el sacrificio que supuso para ti y para tu familia, por todo el legado que dejaste en nuestra comparsa y por todo el cariño que pusiste en cada una de esas cosas.
Eres profundamente admirado, respetado y querido por todos los Marinos Corsarios. Tu historia siempre irá ligada como los eslabones del ancla a nuestra historia. La antigua posada siempre será tu casa y los Marinos Corsarios siempre será tu comparsa.
¡GRACIAS Y HASTA PRONTO!
Marián Ortuño Navarro
Cronista de la Comparsa de Marinos Corsarios
Premios y reconocimientos a lo largo de nuestra historia
31/07/2021 Cronista de La Comparsa – Nuria Ferrándiz Díaz
Distintos son los premios que se han concedido a lo largo de la historia en la comparsa de Marinos Corsarios y distintas sus razones.
El más antiguo de los galardones es el que se otorgaba por la colaboración o agradecimiento, a las personas que altruistamente ayudaban a la comparsa de una u otra manera. Eran reconocimientos que no se realizaban en años consecutivos y en ocasiones se entregaron a título póstumo. Esta denominación de honor comenzó en 1974 y se realizaron un total de catorce menciones hasta 1983. Hemos de destacar que no siempre fueron socios de la comparsa los galardonados, en ocasiones eran personas muy afines que colaboraban de manera generosa y desinteresada en pro de la misma.
En 1984 y con motivo del centenario de la comparsa, se entregó por primera vez el título de “Presidente de honor”, un premio especial que queremos destacar por su implicación en la historia de los Marinos Corsarios. Se entrega a aquel socio que habiendo ostentado el cargo de presidente de la comparsa ha destacado por los méritos realizados durante su legislatura. Tan solo han sido entregados en dos ocasiones, en 1984 a Don Joaquín Marruenda Amorós y en 1998 a Don Manuel Díaz Pérez. Dos socios que han marcado el transcurso de la historia de la comparsa por sus dedicación y servicio desde diferentes ángulos durante muchos años.

Cuadro alegórico de 1988
La comparsa de Marinos Corsarios concede también el título de “Socio de Honor”, a aquella persona, sea miembro o no de la comparsa, que haya tenido una vinculación especial con la misma por diferentes motivos. Este galardón tan solo se ha entregado en tres ocasiones siendo la primera a principios de los años 90 a Don Francisco Berbebal Vázquez. Un joven de la época muy querido por nuestra comparsa, así como a su gran familia festera. Las duras circunstancias del momento que padecía el joven, determinó que nuestra comparsa tuviera un gesto de afecto con él y su familia, para demostrarles el apoyo y cariño que cada una de las familias corsarias sentían hacia ellos. Afortunadamente, el sol brillo para él y hoy es el mejor embajador que la comparsa puede tener fuera de nuestras tierras. Su enorme generosidad y compromiso le ha llevado a los lugares más recónditos del planeta brindando su ayuda y bondad a los más necesitados. La segunda vez fue en 2011 al compositor Don Antonio Milán Juan, por haber realizado o participado en la composición de la mayoría de las partituras de los Marinos Corsarios. Este reconocimiento fue la manera de demostrarle al maestro el aprecio y gratitud que la comparsa le manifestaba. Por ultimo en 2015 se le concedió a Doña Ana María Sánchez Amorós, esposa de Don Manuel Díaz Pérez. Fue un apoyo incondicional a las iniciativas de su esposo, siempre al frente velando por los intereses de la comparsa, acompañándolo en cada una de sus decisiones e incluso lideró alguna de las propuestas que han formado parte de nuestra historia como fue la confección del traje denominado “la chorrera” en 1974. Con este reconocimiento se quiso no solo agradecer la labor de Doña Ana, sino también de todas las mujeres que durante tantos años estuvieron en la sombra y que gracias a ellas, a su dedicación, esfuerzo y perseverancia hicieron grande no solo a la comparsa sino a las fiestas en general.

Insignia de oro laureada.
Los premios de presidente y socio de honor de la comparsa son aprobados por la general a propuesta de la directiva de la comparsa o de algún grupo de la misma. Se les obsequia a ambos con un cuadro de recuerdo y la insignia de oro de la comparsa, siendo la del presidente la insignia laureada.
Otro de los galardones que otorga la comparsa es el denominado “Socio ejemplar”, donde cada año se premia la labor de un socio o socia de la comparsa por su labor en el engrandecimiento de la misma, obsequiándoles con la insignia laureada de plata. Este reconocimiento empezó eligiéndose entre las diferentes propuestas que llegaban a la directiva, siendo esta la encargada de escogerlo. A partir del año 2014 la elección corre a cargo de una comisión compuesta por el presidente, secretario y 10 socios o socias elegidos por sorteo, que tras leer los currículum propuestos votan al ganador o ganadora del mismo. Muchos han sido los premiados y premiadas, y otros más quedan todavía por reconocer ya que se lo han ganado a pulso. Si el espacio lo permitiera nos hubiera gustado mencionar a cada uno de ellos, enfatizando los méritos que los apoyaban para ser merecedores de dicho galardón, pero como no es posible, queremos destacar dos casos concretos por su significado. El primer caso, por ser el primer premio que se otorgó de estas características. Fue en 1980 y se otorgó a Don Ginés Valdés Gabaldón por su labor incansable tanto como festero y colaborador, como amante de las fiestas y de nuestra comparsa. Un emisario ejemplar que mereció este galardón y que hoy día sigue trabajando y dedicando su tiempo por conservar la historia de los Marinos Corsarios. El segundo caso que queremos resaltar es el otorgado a la primera mujer. Fue en 2004 a Doña Francisca Díaz Lázaro, primera socia femenina. Su tesón y determinación fueron cruciales para la incorporación de la mujer en las fiestas y en nuestra comparsa. Su empeño, constancia y trabajo por la misma, además del apego por las fiestas determinaron que mereciera dicho galardón. La lista de méritos de cada uno de los socios ejemplares podría ser infinita, como inmenso es el agradecimiento que la comparsa tiene para cada uno de ellos. Juntos somos mejor comparsa, festeros y sobre todo personas.

Insignia de plata laureada
A parte de estos reconocimientos que para nosotros tienen un carácter especial, también se premia anualmente a los ganadores y ganadoras de los campeonatos internos de la comparsa en las modalidades de truque, dominó, gachamiga, ajo y parchís, los cuales nos representan en los campeonatos del Ecuador Festero organizado por la JCF.
Finalmente, no queríamos dejar de nombrar el campeonato de invierno de la comparsa con modalidades de truque y parchís, que se realiza de octubre a diciembre. Nace con la intención de seguir avivando el espíritu festero en esta época de transición entre unas fiestas y otras, supone el comienzo de un nuevo año donde cada viernes se reúnen, no solo socios y socias, sino también amigos y simpatizantes de la comparsa. Se disfruta recordando los buenos momentos vividos, las sonrisas y el ambiente festivo prevalece en las gélidas noches de invierno, mostrando la naturaleza que caracteriza a los Marinos Corsarios, la hospitalidad y bienvenida a cada persona que nos quiera visitar y conocer.
LOS GRUPOS Y ESCUADRAS DE LA COMPARSA DE MARINOS CORSARIOS
14/11/2020 por Las Cronistas. Marian Ortuño y Nuria Ferrándiz
La comparsa de Marinos Corsarios es rica por la diversidad y singularidad de los grupos que forman parte de ella de manera activa o pasiva a lo largo de su historia.
La definición de grupo que evoluciona en la formación de una Escuadra Especial abarca todas sus dimensiones con la denominada Escuadra de CARIBES, fundada en 1965 y cuyo nombre hace alusión a los Corsarios del Caribe. El estreno como Escuadra Especial se remonta a 1970 y durante su larga trayectoria ha supuesto el eje central para la comparsa. Los hombres valientes que la han constituido a lo largo de sus 55 años tienen una amplia historia dentro de la misma gracias a la amistad, el coraje, la lucha, la superación, el respeto y el amor por la comparsa y sobre todo, a la simbiosis que han mantenido con ella, incluso después de haber colgado sus trajes. La gratitud es un producto de nuestra cultura y la comparsa no puede estar más agradecida a esta Escuadra que sembró las semillas del futuro de los Marinos Corsarios. Mujeres, hijas e hijos, familiares y amigos, que siguiendo su ejemplo, han constituido otros grupos y escuadras, y sobre todo, el más sincero agradecimiento por haber inculcado en todos ellos sus propios valores, haciendo la comparsa más grande día a día.
Con la incorporación de la mujer en la fiesta en el año 1988, surgieron las inquietudes de un grupo de mujeres que decididas a embellecer y realzar las fiestas, trabajaron por un proyecto de futuro formando la primera Escuadra Especial Femenina. El fruto de años de trabajo culminó en 1991 constituyendo la Escuadra de NEREIDAS, cuyo nombre tiene como origen las ninfas del mar. Estas mujeres activas fueron esenciales para el debut de la mujer en la comparsa e impulsoras de la primera reforma del traje femenino de la misma.
Los años 90 fueron hervidero de motivaciones para las integrantes femeninas de la comparsa, que buscaban asiduamente la integración dentro de la misma. Es por ello, que un grupo de jóvenes decididas y con ganas de potenciar la participación de la mujer en las fiestas, constituyó un grupo denominado COLOMBINAS (1990), nombre que derivaba del adjetivo colombino y que refleja todo lo relacionado con el almirante Cristóbal Colón. La motivación de estas jóvenes por juntarse y crear ambiente festero las animó con el paso de los años a dar un paso más allá y formar una Escuadra Especial que llevaría el nombre del grupo (1999). A día de hoy, hubieran celebrado su XX aniversario desfilando por las calles de Villena si las fiestas del 2020 no se hubieran suspendido. La diversidad y acogida por parte de las componentes de esta escuadra de otros miembros, ha permitido disfrutar a muchas mujeres de dentro y fuera de la comparsa, de la majestuosidad de vestir trajes espectaculares y singulares, los cuales marcaron tendencia para otras Escuadras Especiales Femeninas en las fiestas de Villena. Las Colombinas son un referente en nuestra comparsa. Con su esfuerzo, trabajo y compañerismo continúan transmitiendo el amor por seguir haciendo comparsa, invitando a toda mujer con motivaciones festeras a disfrutar con ellas como parte de la escuadra.
La comparsa de Marinos Corsarios presenta varias reseñas de identidad y sin duda, la ofrenda artística constituye una de ellas. El éxito de este desfile es producto del trabajo e ilusión de un grupo denominado OFRENDA constituido por primera vez en 1974, y cuya finalidad era la elaboración artística de obras de arte, que han acompañado a la comparsa durante 35 años prácticamente interrumpidos. A lo largo de este tiempo, mucha gente ha formado parte del grupo, destacando la juventud de la comparsa que atraían a los novios y novias del momento durante esas largas tardes de verano. Aunque sin duda, el gran peso de la misma ha sido sustentado por la maestría y el trabajo de gente con mucha dedicación y amor por la comparsa. Gracias a ellos, los Marinos Corsarios han sido reconocidos en múltiples ocasiones por reproducir y devolver a la memoria de los villeneros, lugares emblemáticos y momentos únicos que han quedado para la historia y el recuerdo. Este grupo fue el enjambre de emociones que sostuvieron motivaciones y anhelos por seguir formando parte de esta comparsa. Sin duda, fue el mejor ejemplo de superación y compromiso que muchos de los jóvenes de la época pudieron aprender.
Las fiestas de Villena presentan ese olor a alábega y pólvora que simboliza la esencia de nuestras fiestas. Son el grupo de ARCABUCEROS de nuestra comparsa los que nos envuelven en ese aroma y nos deleitan cada año con esos momentos tan deseados que comienzan con la llegada de la Mahoma el 12 de mayo, recordándonos a todos los festeros que las fiestas están a la vuelta de la esquina y terminan con la despedida de la Virgen el día 9 para la tristeza y añoranza de los festeros que han de esperar otros 8 meses para escuchar el estruendo pero inigualable sonido de los arcabuces. Este grupo está y ha estado formado por socios masculinos y femeninos, algunos pertenecientes a Escuadras y otros grupos, uniéndoles la pasión por rememorar una reseña histórica de las fiestas de Moros y Cristianos.
Recordar momentos de nuestras fiestas con una sonrisa es pensar en la retreta. En La comparsa de Marinos Corsarios el grupo LOS PERLAS nos deleita año tras año con momentos para el recuerdo. Este grupo se formó en 1981 por jóvenes con ganas de disfrutar y potenciar un desfile desigual que permitiese la desinhibición dentro de la apretada agenda de actos religiosos y protocolarios de las fiestas. La juventud y el tesón de este grupo permitieron impulsar un acto que no tenía demasiada relevancia en la comparsa. A lo largo de los años sus propuestas han conseguido atraer a muchos jóvenes y cargos festeros del momento que desfilan con la comparsa e inundan el local social con trajes y sentimientos festeros diversos. Las mujeres de los componentes del grupo constituyeron un grupo denominado LAS VIGÍAS, acompañando y apoyando en todo lo que estaba en sus manos, haciendo más espectacular dicho acto.
Corrían los años 80 y la juventud de la comparsa mostraba interés por tener su propia identidad y participación dentro de la misma. Fue entonces, cuando un grupo de jóvenes con edades comprendidas entre los 12 y 15 años, muchos de ellos hijos de la Escuadra de Caribes, formó en 1987 un grupo denominado EL CHORRICO. El ímpetu, las ganas de trabajar y su siempre disposición hizo que estos chicos tuvieran un papel relevante en la realización de las ofrendas, la participación en la retreta y la ostentación de cargos festeros de diferente índole. Hoy por hoy, muchos de aquellos jóvenes de la época son los que sustentan los cimientos de nuestra comparsa y velan porque la misma mantenga el rumbo. Son ellos los que tiene muy bien aprendido de sus mayores que las fiestas se disfrutan del 4 al 9 pero se hacen con mucho esfuerzo del 9 al 4.
Esa juventud de los años 80 creció y maduró, sus inquietudes dentro de la comparsa cambiaron, y su afán por embellecer las fiestas determinó en muchos integrantes del grupo el Chorrico las ganas por constituir una nueva Escuadra Especial Masculina que se denominó escuadra MARINEROS DEL CHICHARRA (2009). Su debut coincidió con el 125 aniversario de la comparsa, desfilando por primera vez con el traje “Marinos del Chicharra” perteneciente a la comparsa en los años 1943 a 1945. Por unanimidad decidieron que este nombre sería el que identificaría a la Escuadra Especial. Han pasado más de 10 años desde que la Escuadra se formó y sus integrantes siguen igual de comprometidos, siendo fieles cumplidores de lo que se recoge en sus estatutos con el objetivo de engrandecer a la comparsa y fomentar la sana alegría y camaradería de los miembros.
Pertenecer a una comparsa desde que eres un niño supone crear unos lazos de amistad muy importantes dentro de la misma y de ahí surgen los ¨amigos de la comparsa¨. Con ellos compartes años de carroza, desfiles infantiles, comidas, almuerzos, y un sinfín de cosas, para posteriormente incorporarse a los bloques adultos. La mayoría son hijos e hijas de padres y madres que a su vez han formado parte de otros grupos o escuadras dentro de la comparsa, y como si del destino se tratase, saben que un día formarán su propio grupo con esos “amigos de la comparsa” que solo ven los días de fiestas. Pues bien, esta historia que parece de lo más corriente para pequeños ¨festericos¨ que crecen para convertirse en grandes festeros, es lo que les sucedió a varios grupos de la comparsa. El grupo LOS BOMBILLAS y DE LA LOSILLA AL PORTÓN, el primero de niños y el segundo de niñas, creados a finales de los años 80 y principios de los 90, estaban compuesto por socios juveniles de 14 y 15 años. Algunos de estos niños y niñas no prosiguieron su andadura dentro de la comparsa como socios adultos y otros se integraron o formaron otros grupos. Por aquellos años 80, unas socias juveniles formaron el grupo las ANCLAS para posteriormente en 1988 denominarse las NAYARIT y finalmente con el cambio de traje femenino en 2003 las CATALEJO. Estas jóvenes han sido muy activas en la participación de ofrendas y retretas, destacando su alegría y hospitalidad hacia otras socias juveniles y formando parte de otros bloques adultos femeninos. Un caso similar es el grupo LOS CAMISAS NEGRAS, socios masculinos con larga trayectoria en la comparsa y que tienen su manera propia de entender las fiestas.
Las experiencias dentro una comparsa unen mucho a los socios y sin duda, esa experiencia la vivieron los componentes del grupo LA MUERTE PELA que se constituyó como grupo en el año 2000, y durante los años 2002-2004 formaron prácticamente en su totalidad la directica de la comparsa llegando a buscar un nombre para salir de Escuadra Especial. Destacaron por las actividades infantiles organizadas en las comidas de hermandad y como anécdota está la creación de una nueva casaca de arcabucero que finalmente no se materializó.
Finalmente, hablaremos de LOS GUILLERMO BROWN, el último grupo formado en la comparsa en el año 2012 y cuyo nombre hace alusión al padre de la armada Argentina. La mayoría de sus componentes son hijos o nietos con legado corsario, algunos incluso de los que fueron socios fundadores de la comparsa. Hombres que han sabido apreciar que es importante conocer y respetar nuestras raíces festeras porque el mérito del logro es responsabilidad de todos. Han entendido que las casualidades no existen y que los valores y las tradiciones festeras perduran porque van contigo, vivas donde vivas, para reencontrarse con todos ellos durante las fiestas de Villena.
Todos estos grupos han enriquecido la larga historia de nuestra comparsa y han creado entre ellos unas conexiones imborrables. Se demuestra una vez más, como los Marinos Corsarios siendo pequeños en número de socios, somos inmensamente ricos en aptitudes, virtudes e intereses con la ilusión y el deseo de permanecer siempre unidos y seguir haciendo grande nuestras fiestas de Moros y Cristianos.
LAS CRONISTAS
Una Travesía inesperada
03/09/2020 Las Cronistas Marian Ortuño Navarro
Todo comienza el 9 de septiembre de 2019. Nuestros cargos festeros se preparan para partir de tierra firme, rumbo a las fiestas de 2020. Un año lleno de ilusiones y sueños, que aflorarán en ese primer acto por las calles de Villena, desfilando al son del “125 Aniversario”. Nervios y emociones marcarían una travesía, que sería muy especial…
Llegado noviembre, el timón del buque corsario cambia de capitanía y tripulación. Un grupo plural, joven y paritario de la comparsa, formado por amigos y familiares, que después de muchas reuniones, entrevistas y llamadas, forman una nueva directiva con el objetivo de descubrir apasionantes rutas. Para la mayoría, es la primera vez en asumir tal responsabilidad. El funcionamiento de un barco requiere de muchas y variadas acciones: dirigir, organizar, planificar, compartir y debatir un sinfín de actividades e ideas… para conseguir una travesía segura, genuina e inolvidable para todos los marineros y marineras. El barco está a punto de zarpar y pronto asumirán su responsabilidad, afrontando este gran reto, con nervios e ilusión, deseando que todos se sientan únicos e importantes dentro de esta gran familia.
Rápidamente se ponen a trabajar. Ilusión, escucha activa, complicidad, confianza, integración, respeto, empatía, corresponsabilidad y un buen sentido del humor serán las directrices que marcarán la nueva hoja de ruta, encabezada por la capitana Fuensanta Martínez.
Viento en popa y a toda vela navegarán hacia el primer puerto y una vez en tierra, se celebró el acto de entrega de trofeos del campeonato de Navidad. Fue una velada extraordinaria en el local social de la comparsa, donde tras conocer a nuestros representantes para el Ecuador Festero, se ofreció un refrigerio por el buen hacer de participantes y colaboradores. Esta primera travesía ayuda a la nueva directiva a coger el timón con destreza y pericia.
El siguiente destino será crucial, se dirigen hacia uno de los grandes momentos festeros en Villena, el Ecuador, que a su vez dará la bienvenida a las fiestas de 2020. Pero antes, una breve parada para cargar de ilusión y motivación a las madrinas de la comparsa, nos referimos al acto de entrega de peinetas, organizado por la Junta Central de Fiestas. Cati y Ainhoa fueron obsequiadas y nombradas Madrinas Mayor e Infantil de la comparsa de Marinos Corsarios, en un bonito y emotivo acto realizado en el majestuoso Teatro Chapí.
Ya de vuelta en el barco y a punto de zarpar hacia el próximo puerto, se realizó el tradicional brindis navideño, fue el colofón al año que acababa y sirvió de entrada al nuevo año que pronto comenzaría, con los mejores deseos para todos y todas.
Con el mar en calma y las velas a media asta, comienza el nuevo año, pero la calma de los festivos días navideños tiene sus días contados… la Junta Central de Fiestas (JCF) da comienzo a la celebración de su 50º aniversario. Se presagia un año repleto de nuevos actos y acontecimientos singulares, que se archivarán para la historia y el recuerdo. De pronto, el aire sopla con fuerza y todos los tripulantes vuelven a sus puestos.
El comienzo es una vorágine: reuniones de presidentes, cronistas, compromisarios, directivas… surgen propuestas que decidir, problemas a resolver, acuerdos que tomar y grandes ideas por materializar, con el fin de hacer que este barco corsario reluzca como nunca. Destacar la entrada con fuerza en las redes sociales, de una delegada joven y con talento, que moderniza las comunicaciones y divulgaciones del barco, proponiendo nuevas estrategias de navegación que permiten hacer más atractiva y entretenida la travesía, llevando la voz corsaria a más puertos, a nuevos destinos.
Los días y las noches pasan rápido. Cuando se quieren dar cuenta ya están preparando el Ecuador interno de la Comparsa, preludio del Ecuador Festero y primer acto que anunciará las tan ansiadas fiestas de 2020. La organización y planificación de la directiva genera innumerables listas de trabajo: un local social que preparar, enseres por revisar, permisos por aprobar ¡y los nervios a flor de piel! Se preparan los concursos de gachamiga, ajo, truque y dominó, recuperando la comparsa el concurso de dibujo infantil y juvenil a cargo de la escuadra especial de Marineros del Chicharra, con la colaboración de la escuadra especial de Colombinas.

En este día, 23 de febrero, todos se asomaron a la cubierta, de proa a popa y de babor a estribor se respiraba alegría y entusiasmo por vivir ya, un trocito de las fiestas. En cada rincón se podían ver grupos dispuestos a participar, colaborar y disfrutar de los concursos, la comida y sobre todo, del ambiente familiar y festero que nos caracteriza.
La semana siguiente se arribaría a un relevante puerto, el Ecuador Festero. Para entonces la directiva había cogido ya experiencia al timón, confiando en el trabajo realizado para desarrollar con éxito el desembarco. Fue un fin de semana vibrante, siendo el primer acto oficial que preparaba la nueva directiva de la JCF y con él comenzarían los actos de celebración de su 50 aniversario.
Durante la mañana del sábado 29 de febrero los cargos infantiles pudieron disfrutar de todas las actividades que se prepararon para los más jóvenes. Ya por la tarde, después de realizar las fotos oficiales a los cargos festeros, se organizó un desfile por las calles de Villena con un boato conmemorativo muy especial, formado por aquellas banderas de las comparsas que habían sido oficiales desde 1970, año de fundación de la JCF. Como colofón al día, una cena y una verbena que cerraban lo que sería la antesala del gran día.
Y llegó el domingo del Ecuador, tocaba madrugar, igual que si estuvieran en fiestas. Un buen chocolate con churros y unas risas tempraneras antes de trabajar serían el mejor combustible para empezar con energía el día. Con gran efectividad y eficacia, la directiva y colaboradores prepararon todo lo necesario para que la familia Corsaria disfrutara de un suculento almuerzo a la llegada de nuestros cargos festeros. Y para acabar los actos del Ecuador, la comparsa de Piratas organizó una comida con tardeo en el barco pirata.

Almuerzo Ecuador Festero 2020.
Fue un fin de semana muy completo, lleno de alegría, amistad, compañerismo y complicidad. Tanto la capitana como su tripulación, pudieron sentir el orgullo de dirigir y formar parte de estar gran comparsa.
Al día siguiente, de nuevo en el mar y brújula en mano, se dispusieron a llegar a su destino final, las Fiestas de Moros y Cristianos de 2020. Las aguas estaban tranquilas, mostraban un color cristalino poco común para esa época del año. Nada ni nadie hacía presagiar que esa calma podría ser la antesala de una gran ola, ¡un tsunami!
De pronto, algo hizo encallar al barco, quedaron varados y casi sin respiración cuando se anunció que una pandemia mundial denominada COVID-19 había sido la causante. ¡Podía costarles la vida seguir navegando en esas aguas! De pronto la brújula desvió el rumbo y los motores, que con tanta bravura habían movido el barco, pararon de repente. No tenían herramientas ni tecnología para combatirla, y el desconocimiento era tan grande que se vieron obligados a echar el ancla y fondear el barco. Era muy inquietante lo que estaba ocurriendo, se puso en jaque a toda la humanidad, paralizando así a toda la sociedad. Aunque todo se detuvo de repente, un arraigado espíritu marinero les hizo confiar en que pronto pasaría la tormenta, retornando a la normalidad.
Para hacer más amena la espera, la tripulante encargada de las redes desarrolló nuevas ideas creativas que se plasmaron telemáticamente, activó mecanismos que permitieron recordar la historia festera de cada miembro en la comparsa; un bingo donde cada casilla hacía referencia a un momento tradicional o a un hecho destacado; para los más peques un concurso de dibujo para colorear el anagrama corsario y por último, un álbum de fotos con los recuerdos de la historia de la comparsa.
Y fueron pasando lentos los días entre juegos, recuerdos y videollamadas, pero el virus lejos de remitir seguía expandiéndose hasta llegar a todos los rincones del planeta.
Al llegar el mes de mayo, durante aquellos momentos de espera, de súbito, un rayo alcanzó la proa de un barco amigo, deteniendo por un momento los corazones de marineros y marineras. Comprobaron que las fiestas de la vecina localidad de Biar se habían suspendido, este año por tanto ¡no vendría la Mahoma a Villena! Poco después, la JCF anunció la suspensión de todos los actos preparados con motivo de su 50 aniversario, durante los meses de mayo, junio y julio, lo que puso en alerta a todos los festeros de Villena.
Inicialmente la tripulación habían decidido seguir navegando, pero la tempestad les impidió continuar y regresaron a casa. Dos sentimientos se enfrentaban en la tripulación, de un lado la tristeza, angustia e inquietud por toda la incertidumbre generada y por otro, la esperanza imbuida de ese espíritu festero, de que todo pasaría y que en septiembre volverían a disfrutarían de las queridas fiestas de Moros y Cristianos.
Las primeras valientes fueron las componentes de la escuadra especial de Colombinas, al anunciar con mucha tristeza y serenidad, ya que celebraban su XX aniversario, que estas fiestas no saldrían a desfilar. Era mayo y estaban por cerrar muchos contratos con músicos, modistas/os, maquilladora/es, boatos, local social… pero la complejidad de los acontecimientos imposibilitaba la toma de decisiones y sobre todo la confección de los trajes.
La tristeza e incertidumbre de los cargos oficiales iba en aumento, cada día veían más cerca esa tan previsible como inevitable decisión final, que rompería sus sueños e ilusiones por las fiestas del 2020.
En esta difícil situación afloraron por parte de la directiva, esos aspectos humanos tan importantes, la solidaridad con aquellos socios y socias más desfavorecidos y el máximo apoyo para afrontar los problemas económicos y personales que iban surgiendo. Se decidió posponer el cobro de cuotas hasta que las circunstancias vislumbraran un horizonte más optimista. Finalmente, el 17 de junio de 2020 se celebró la Asamblea General Ordinaria de la JCF, donde se hizo oficial la noticia, el sentido común y la responsabilidad humana y sanitaria obligaron a declarar la suspensión de las fiestas de Moros y Cristianos 2020, un acontecimiento que tan solo había sucedido anteriormente en una
ocasión en la historia de las fiestas de Villena, debido a la guerra civil española (1936-1938). La suspensión por la pandemia, era un secreto a voces, algo que nadie hubiese querido oír pero que se entendía inevitable para salvaguarda la salud de todos los ciudadanos y ciudadanos de Villena.
Estos hechos y circunstancias han provocado una profunda tristeza en la ciudadanía y resulta imposible pensar cuantos sueños e ilusiones se habrán quedado por el camino, así como en el dolor y vacío que festeros y festeras sentirán el próximo 5 de septiembre, cuando a las 4 de la tarde no puedan vivir ese mágico momento que supone ver a su querida Banda Municipal de Música abriendo el desfile, al son del pasodoble “La Entrada”, del maestro Quintín Esquembre.
Pero ese no es el rumbo ni el horizonte donde mirar. El barco se ha detenido, sí, pero todos los marineros y marineras deben seguir con más motivación y ánimo que nunca. Las Fiestas de 2021 llegarán con mucha más ilusión, todos recobrarán la alegría y se construirán nuevos sueños.
Cati, Valero, Paco, Ainhoa, Alejandro, Víctor, la travesía no acaba aquí, la aventura no ha hecho más que empezar y pronto la retomareis de nuevo. Colombinas, este año no será vuestra celebración, pero en el 2021 se celebrará vuestro XX + I aniversario, vaya por delante la admiración y felicitación de toda la comparsa. Directiva, ahora no hay tiempo para relajarse porque las fiestas del próximo año tienen que ser las más espectaculares y grandiosas de la historia de la comparsa. Y a todos los Marinos Corsarios deciros que vosotros y vosotras sois lo más importante de la travesía, sin vosotros no existiría ningún proyecto festero. La comparsa os necesita con más fuerza que nunca, permitir aflorar vuestros sentimientos de tristeza y rabia. La tormenta pasará y un nuevo amanecer mostrará un nuevo destino, las fiestas del 2021. Tanto la tripulación como su capitana están preparadas y ansiosas por volver a faenar en nuevas aguas. Mantener el ánimo y el espíritu festero que lleváis dentro porque ninguna pandemia podrá con vosotros. Se vivirán intensamente todos los actos que con tanta dedicación y trabajo han programado la JCF para conmemorar el 50 más 1 aniversario.
Por último, a la comparsa de Marinos Corsarios le gustaría agradecer al pueblo de Villena el comportamiento ejemplar durante los tiempos difíciles que se están viviendo a causa del COVID-19. Esta pandemia la venceremos juntos, las fiestas de Villena en honor a Nuestra Señora de las Virtudes volverán con más energía que nunca y volveremos a gritar ¡Día 4 que Fuera!
Salud y ánimo para todos.
Las cronistas
Una pieza corsaria en el engranaje de la JCF
Eran tiempos difíciles donde la presión política y económica hacía frenar la formación de muchas asociaciones. D. Francisco Mullor García, presidente de los Marinos Corsarios (1969-1972), junto a un grupo de presidentes de las comparsas de aquella época, decidieron formar una comisión de fiestas que se constituyo formalmente en 1970 con D. Alfredo Rojas como presidente. La dedicación y empeño de D. Francisco durante los seis años que formó parte de la Junta Central de Fiestas (JCF), hicieron que alguna de sus propuestas sigan todavía vigente tanto por la trascendencia que tuvieron en su momento como la importancia que continúan teniendo. Entre ellas, cabe destacar la propuesta que fue aprobada en 1971, de otorgar un premio diferente a la mejor Escuadra Especial de cada bando. Hasta entonces solo se otorgaba un premio único, fuese del bando Moro o del bando Cristiano. Don Francisco argumentó la dificultad que presentaban las escuadras del bando Cristiano por competir en igualdad de condiciones con las escudaras del bando Moro debido a la majestuosidad tanto del diseño como de la confección de los trajes, así como las peculiaridades propias de cada uno de los bandos. Otras de las propuestas que se realizaron ese año y que se mantienen en la actualidad fueron la de hacer el Ecuador Festero, realizar el desfile de la Esperanza y la publicación del boletín “Día 4 que fuera”.
Un hecho curioso que pone de manifiesto la entrega y dedicación de D. Francisco por las fiestas, fue encargarse de manera altruista de la organización y distribución de las sillas por las calles de Villena durante los desfiles de Moros y Cristianos. Durante los primeros años, la crisis económica determinó la falta de recursos para contratar a una empresa que se encargase de realizarlo, sin embargo, D. Francisco puso a disposición de la JCF sus propios empleados y materiales para que se llevara a cabo sin gasto alguno.
Finalmente, desde estas líneas queremos agradecer a esos primeros hombres que fueron piezas fundamentales del engranaje que daría lugar a la JCF, por su valentía, disposición y trabajo en aquellos comienzos complicados, pero que sin duda sembraron la semilla de lo que conocemos cinco décadas más tarde.
Las cronistas
Ecuador Festero Marinero
Nos encontramos en el mes de febrero y nuestra comparsa ha celebrado una vez más el Ecuador interno. En estas jornadas se han seleccionado a los finalistas de cada una de las modalidades que representaran a nuestra comparsa en el Ecuador Festero que tendrá lugar los días 29 de febrero y 1 de marzo en la cuidad de Villena.
Destacar que durante varias semanas se han celebrado los campeonatos de parchís, truque y dominó en el local social de la comparsa, contando con un significativo número de socios participando en cada uno de las categorías las siguientes parejas: cinco parejas en parchís, cuatro parejas en truque y dos parejas en dominó. Desde el grupo directivo nos gustaría felicitar a todos los socios y socias que han participado, ofreciendo noches de buen ambiente y sabiduría festera, así como la motivación que han transmitido a nuestros a principiantes en estos quehaceres, que seguro repetirán en próximos años. El cierre de estos campeonatos se celebro con un refrigerio en el local social para agradecer la cooperación de todos los participantes y el esfuerzo de los colaboradores.
Posteriormente y durante el domingo 23 de febrero, la comparsa ha realizado varios actos de convivencia junto al tradicional concurso de ajo y gachamiga, para seleccionar a nuestros representantes en el Ecuador Festero. Subrayar la alta participación de los socios y socias, con ocho parejas en la modalidad de gachamiga y cuatro en la de ajo, así como el alto nivel gastronómico de los mismos, que dificultaron la selección de los ganadores por parte del jurado. A continuación, y junto a familiares, amistades, cargos festeros y asistentes en general, se disfruto de un almuerzo cargado de buen ambiente festero y mucha armonía, por todos los presentes. Agradecer a las tres escuadras especiales; Caribes, Colombinas y Marineros del Chicharra por la hospitalidad en sus sedes sociales, facilitando la organización de la jornada de convivencia.
Asimismo, resaltar que fue una jornada pensada para todos los miembros de la comparsa y entre los actos de convivencia que se organizaron a lo largo de la mañana destacamos:
- Concurso de dibujo infantil y juvenil, celebrado en el local social y organizado por la Escuadra Marinos del Chicharra y con la colaboración de la Escuadra de Colombinas. Fue un verdadero placer disfrutar del talento artístico de nuestros más pequeños y evidenciar la ilusión de todos ellos en el Ecuador Festero Corsario. Durante unas horas, el jolgorio y el ruido se apoderaron de las paredes de la comparsa. Tuvimos el honor de estar acompañados por las madrinas infantiles de nuestra comparsa y de la comparsa de almogávares. Agradecer la gran participación en el concurso y felicitarles porque todos fueron ganadores, destacando en especial, el talento de:
Categoría de 2 a 5 años: 1º Valeria Ibáñez y 2º Martina Ibáñez
Categoría 6 a 9 años: 1º Rodrigo Martínez y 2º Valeria Cantos
Categoría 10 a 14 años: 1º Ainhoa Carbonell y 2º Pablo Sánchez
- Misa en honor a los difuntos de los Marinos Corsarios celebrada a las 12:00 PM en la parroquia de Santa María. Se vivieron momentos de nostalgia al recordar a los socios Alfonso Egea Ferrándiz y Manuel Ferrándiz Esteban. Cuñados y grandes amantes de la comparsa, los cuales vivían de manera muy especial todos los actos y con más intensidad los del Ecuador. Acompañando a la familia estuvieron los cargos festeros, amigos, socios y, como no, la escuadra de Caribes que tantos momentos han vivido junto a ellos.
- Hermanamiento con la comparsa de los Garibaldinos de la vecina localidad de Sax. Sus capitanes nos acompañaron durante la jornada del domingo y en un pequeño y emotivo acto, hicieron entrega a nuestra presidenta, Doña Fuensanta Martínez López de la insignia con el escudo de su comparsa. A su vez, la presidenta les correspondió con la insignia de los Marinos Corsarios. Gracias por acompañarnos, estamos convencidos que en el futuro disfrutaremos de muchos otros momentos de hermandad.
Para concluir la jornada de convivencia la comparsa organizó un pequeño aperitivo en el local social con el que se dio por finalizado los actos programados en nuestro ecuador interno.
Por último, desde aquí y como ya ha sido reiterado en redes sociales, la directiva de la comparsa quiere agradecer a cada unos los participantes y colaboradores, su gran labor, trabajo y sacrificio para el buen desarrollo de cada uno de los actos del Ecuador Interno, algunos de esos grandes momentos, han sido inmortalizados en el álbum y archivo fotográfico de la comparsa y quedarán en el recuerdo de todos los miembros.
Finalmente, enviar nuestros mejores deseos a todos los finalistas que nos representarán en el Ecuador Festero. Disfrutar de cada uno de los actos que se celebrarán esta semana con motivo del Ecuador Festero. Para todos nosotros ya sois nuestros campeones y campeonas: ¡Ánimo Grumetes!
Listado de los ganadores y representantes de la comparsa en los diferentes campeonatos y concursos del Ecuador:
TRUQUE Representantes: Francisco Puche Flor y Pedro Cortés Serrano.
DOMINÓ Representantes: Francisco Valera Pujalte y Juan José Navarro Palao.
PARCHÍS Representantes: Francisco José Pascual Ruano e Ino Navalón Torres.
GACHAMIGA Representantes: Ricardo Martínez López y Fernando Calvo Tomás.
AJO Representantes: Pilar Sáez Navarro y Patricia López Ibáñez.
Acervo festero: “¡Tierra a la vista!”
José Ramón Morales Espinosa – Cronista Comparsa de Marinos Corsarios.
En la buhardilla de casa se amontonaban trastos viejos y antiguos, el polvo cubría todo como una manta. El olvido, el silencio y el desuso de lo que allí se encontraba propiciaba un halo de misterio aumentado por la tenue luz del ocaso.
Dejémonos de misterios y vamos al grano, los gritos de mi madre se oían hasta en la China: – ¡Limpia todo lo de ahí arriba si no lo tiro todo a hacer puñetas! ¡Está todo manga por hombro y así no se encuentra nada! Nos dispusimos a poner un poco de orden, que no duraría más de dos meses, a trasto quitado trasto puesto.
Entre todo lo que comenzamos a mover salió un palo redondo, me llamó la atención, -¿esto qué es? Mi madre lo ojeó con duda y dijo: -¿eso?, eso es el catalejo de Colón. Tu padre se lo hizo a Saúco para salir de cabo con él.
Toda una sorpresa, un catalejo de madera maciza torneada y del traje que utilizó la escuadra especial de Caribes en los años 1970 y 1971. Apunto dos años pues desfilaron en dos fiestas con el mismo traje especial debido a que dado el éxito y la admiración que cosecho, en 1970, se planteó a la Junta Central de Fiestas que se instituyera un premio a la mejor escuadra especial del bando cristiano, pues hasta la fecha sólo era el bando moro quien recibía tal galardón. Tras la aprobación por la JCF y previo permiso, al año siguiente volvieron a salir con el mismo traje concediéndole el primer premio a la mejor escuadra especial del bando cristiano.
Raudo y veloz abrí la caja de latón de las fotografías en blanco y negro, las de fiestas. Y… la encontré, la prueba ante mis ojos, el catalejo empuñado por Sauco a los pies del muro de “los Salesianos” y acompañado por otros caribes de entonces, una gran prueba y una gran foto.
Esta escuadra en 2014 cumplió su cincuentenario y en 2020 el traje de “Colón” o “Almirante” cumplirá cincuenta años, de aquellos trajes ya no queda nada, nada salvo el catalejo con el que aquel cabo “Colón” de 1970 gritó: – ¡Tierra a la vista!
Microrrelato: Buscando historias
21 Mayo 2018, Autor: José Ramón Morales Espinosa – Cronista de la Comparsa de Marinos Corsarios.
El papel amarilleado por el tiempo daba más emoción a la consulta del documento. ¿Quién fue el primero en consultarlo? Fue hace 134 años. ¿Quién, tras ojearlo con detalle, se lo introdujo en el bolsillo del pantalón y se dirigió a uno de los eventos que anunciaba?
Bartolo salía de la Posada de El Sol. Al hombro un trípode de madera con piezas metálicas y en la otra mano una especie de caja con una tela negra que se dejaba caer.
El gentío discurría por la calle de tierra dura, aun así el polvo se levantaba por el corretear de los chiquillos. Todos subían en dirección de la Puerta de Almansa. Allí, imponente, majestuoso,… ¡el castillo!
Era de madera. La gente subía y se apelotonaba sobre él. Todos vestidos de festeros. Cada uno de su comparsa. Todos esperando la acción.
Bartolo colocó con esmero el trípode, ubicación, posición, luz,… y encajó la caja encima, con su tela característica. Era su nueva adquisición. Su cámara de inmortalizar momentos efímeros. Dispuesta.
De nuevo sacó el programa del bolsillo y releyó:
“Solemnes festejos Cívico-religiosos, que el Municipio y los vecinos de la Heroica y M.N.L. y Fidelísima Ciudad de Villena celebrará en los días 5, 6, 7, 8, 9 y 10 de Setiembre de 1884”
Lo abrió y busco:
“Día 6… A las cuatro y media de la tarde las comparsas de caballeros Cristianos, Marinos y Tercios de Flandes se situarán en el castillo –La de Guerreros Romanos pedirá alianza a los del fuerte y seguidamente harán lo mismo los Estudiantes, recitando una grandiosa embajada compuesta por Don Pascual Estañ y Guzmán.
Hecha la alianza, las comparsas de Moros, Turcos, Marroquíes y Moros guerreros, atacarán de improviso el fuerte por las calles, Corredera y San Sebastián, los que después de una ligera escaramuza serán rechazados.”
Era el momento, todo preparado, cámara, fotógrafo y campana. Tras el teñir impulsivo de su pequeña pero sonora campana, la gente se giró mirando atentamente en dirección al sonido y Bartolo inmortalizó en una imagen lo que en su programa de mano acababa de leer.
La duda se difuminaba. La foto la había visto en varias ocasiones en Villena Cuéntame. La curiosidad me hacía preguntas en relación a esos marineros que aparecían encima del castillo de madera ¿Qué hacían o que iban a hacer? El documento encajó a la “perfección” con la fotografía. Bartolo en esta ocasión no tuvo tan sólo una flauta. Tuvo cámara y tuvo estilo.
Pero mi atención esta vez volvió al principio… del Programa…
“Solemnes festejos Cívico-religiosos,… en los días 5, 6, 7, 8, 9 y 10…”
Sí, diez. Del 5 al 10. Qué fiestas aquellas y qué fiestas estas. Emoción, imaginación y misterio.
Identidad y renovación
15 octubre, 2017 Cronista: María Jesús García Beneyto
Tiempos aciagos nos está tocando vivir. Tiempos en los que la locura y la insensatez se adueña de las calles . Tiempos en los que la sinrazón quiere vestirse de verdad, de “ seny” . Quizá nuestros microrrelatos sean la fuente fresca que calme nuestra sed y nos apacigüe el alma .
Quizá en este pequeño mundo que compartimos no importe qué colores configuren nuestros trajes que con tanto mimo y cariño nos ponemos el día 5, no importe si estás de acuerdo con decisiones de tu directiva , no importe si eres más o menos religioso, no importe la “picailla” entre escuadras especiales , entre grupos de Ofrenda , entre grupos de Retreta, no importen… tantas nimiedades. Nos regimos por un solo SENY , una sola identidad el sentimiento por la Fiesta, por Nuestra Patrona.
Tengo , como decimos en Villena, la cabeza espesa. No sé cómo afrontar este relato. Todavía estoy sin saber muy bien qué escribir. Quería contaros la sensación de satisfacción de las socias de los Marinos Corsarios que salieron el día 5 luciendo un cambio en nuestra vestimenta.
Después de un año donde se aportaban ideas, se confeccionaban los distintos prototipos, se debatían y discutían pros y contras del cambio por fin vio la luz nuestro nuevo traje oficial. Fue un año dónde aunamos lazos de amistad y concordia mujeres que apenas nos conocíamos, con visiones diferentes de la realidad de nuestra comparsa y por ende de la vida , con un objetivo común: cambiar sí, pero manteniendo nuestra identidad Corsaria( nuestro seny) . Creo que lo conseguimos, espero que hayáis disfrutado al vernos pasar del mismo modo que disfrutamos nosotras y que nuestra Comparsa, supongo. Pronto será la Junta, allí se analizarán las Fiestas pasadas y daremos paso a nuevos aires Corsarios con la nueva directiva que de esa Junta salga. Quizá sean las últimas líneas que os escribamos como cronistas pero siempre estaremos ahí.
Microrrelato: Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid (Microrrelato de una microexperiencia)
Era entonces una estudiante de Derecho poco afortunada. Durante algunos años tuve que emplear los primeros días de septiembre en realizar tediosos exámenes que me alejaban de los días más grandes de mi Villena. Huyendo de la algarabía festera, me refugiaba para estudiar en las casas de mis hermanos, situadas en la parte alta de la ciudad, más silenciosa. Aún así, durante los descansos, era inevitable escuchar en la radio o ver en la Intercomarcal el desarrollo de los desfiles, buscar las caras conocidas entre los bloques y filas, y morderse las uñas de desesperación.
Y ese año estaba decidido. Me había quedado sin fiestas en mi pueblo pero no iba a despreciar la invitación de mi amiga, mi hermana de dolencias hospitalarias, para visitarla, una vez más, en su ciudad. Y así, “aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid”, acepté de buen grado ir hasta su Pucela natal, esta vez para disfrutar de sus fiestas septembrinas, que nada tenían que ver con las nuestras de moros y cristianos, pero que igualmente llegan al alma, porque las fiestas, de aquí y de allí, son la pasión con la que se viven. Escuché un pregón de altura ofrecido por mis siempre apreciados Celtas Cortos, concierto, feria y vinos de la tierra, muchos vinos de la tierra. Mis amigos se desvivieron para que disfrutara lo mejor de sus fiestas y yo, agradecida, me entregué al disfrute, sobre todo al de los citados vinos castellanos. Bien halladas “casetas regionales”: ¡qué vinos y qué memorable melopea! Aquello sí que fue tremenda caída en los brazos de Baco.
Fue grande, muy grande. Y desde aquel maravilloso septiembre yo estaba en deuda con mis amigos vallisoletanos. A mí me correspondería en alguna ocasión brindarles lo mejor de mis fiestas. Y fue este año. Llegaron con la Retreta, disfrutaron La Alborada y los fuegos, y despertaron con la animada diana. Y vieron el Castillo engalanado para la Embajada del cristiano al moro, impresionados por los arcabuces y la bajada de la Mahoma. Agradecieron la hospitalidad de villeneros animosos y se recompusieron de la falta de sueño con un buen caldo con pelotas. La tarde del día ocho les descubrió festeros solemnes y la noche, la devoción a nuestra Virgen Morena. Verbena popular que les condujo directos al despertar dianero y, contundente almuerzo que hilaron con la cómica corrida de toros de nuestros “marineros”. Buena paella valenciana que compartieron con la “armonía” de nuestros músicos y, sin descanso, desfile de nuevos cargos y acta de premios. Una pequeña muestra y un cursillo acelerado sobre vivencias y sentimientos, y mis “pucelanos” marcharon un lacónico día diez, conscientes de la intensidad con que disfrutamos esas fiestas de las que, tantas veces nos han escuchado hablar; conocedores de la amabilidad de nuestras gentes y de la facilidad con la que, en estos días mágicos, se es “uno más”. Uno más en la casa, en la escuadra, en la comparsa, en la calle. Uno más allí y aquí. Para eso están los amigos. Lo tuyo, mío. Y lo mío, tuyo. Así que:
¡Viva la Antigua y viva la Arcedianal de Santiago! ¡Viva el Campo Grande y viva el Paseo Chapí! ¡Arriba el Pisuerga y arriba el Vinalopó! ¡Vivan las Denominaciones de Origen! ¡Viva el Katakí! ¡Viva Pucela y viva Villena! ¡Viva la Virgen de San Lorenzo y viva la Virgen de las Virtudes! ¡Viva, viva!
Crónica de Fiestas 2017 Marinos Corsarios

Disculparéis que no podamos ofreceros imágenes, y es que creemos que será mejor no desvelar la sorpresa y emplazaros al día 5. Así esperaréis, con más ansias si cabe , nuestra llegada.
Mª Jesús García Beneyto
Cronista Marinos Corsarios